Sunday, February 05, 2006

Creando lo imperdonable...

La habilidad de crear es al fin y al cabo una característica del hombre que lo aleja de su propia animalidad, la perfecta forma de darle vida a las ideas, de llevar una idea al mundo real y darle cuerpo, de vestir las palabras, las imagenes, los sonidos, y dejarlos ver la luz del cruel mundo y su desprecio, lo real y lo humano, lo verdaderamente humano que no es más real que cada uno de mis miedos, esos mismos que me han atrapado y no dejan que la fórmula se haga positiva, que el balance al final del ejercicio sea más que surreal, momentaneo, etereo y por su misma naturaleza, doloroso.

Antes solía poder crear mundos, y destruirlos cuando asi me parecía, antes podía permitir que todo el espacio en mi cabeza se llenara de imagenes, y una de ellas corriera libre y saltara fuera de su encierro para convertirse en una positiva indicación que aun mi alma no hubiera muerto; que sucede ahora cuando la frustración no deja espacio para que ninguna idea reciba la energía suficiente que la haga gritar, saltar, correr, y reclamar su libertad, todo lo que queda es un ejército de languidos hijos bastardos de lo que alguna vez fue expontaneo y sublime, muriendo de hambre en campos desolados, donde no pueden alimentarse. Creo que les he fallado, creo que las he abandonado, pero en este momento creo que la brújula no está indicando el camino de regreso a lugares más seguros, simplemente se ha detenido en la idea fija de desaparecer el dolor, aunque lo que quede luego de deshacernos de él no sea más que un caparazón vacío.

Aun asi, últimamente he pensado en el verdadero dolor como una forma de rediseñar los mapas, mis mapas, aprender nuevas maneras de recorrer el mundo, y de guiar a aquellos hijos desnudos que en este momento mueren sin poder encontrar la guía que los lleve al mundo real, al mundo desgarradoramente humano, pero que es donde desean estar. Recuerdo hace algún tiempo, cuando me dedicaba a dibujar con mucho más entusiasmo, que alguna vez lesioné mi muñeca derecha de manera que perdí por algunas semanas la movilidad de esa mano, o por lo menos la movilidad normal; pero aun asi, dibujar era lo que me mantenía en movimiento, asi que no me iba a detener, y la verdad nunca pude hacer ni mierda con mi mano izquierda, asi que tomé el camino doloroso y seguí creando con mi mano derecha, la experiencia más dolorosa que he tenido, pero cuando pude evitar los movimientos que hacían que doliera, un nuevo camino se mostró intransitado frente a mi, las líneas familiares, las seguras, las agudas, las que mejor conozco, todas tenían nuevas formas, y era increible, como si una persona totalmente distinta estuviera ejecutando mis propias intenciones. Y creo que ese ejercicio puede repetirse una vez más.

Lamentablemente aun no estoy listo para volver a dibujar, pero no es en las artes donde unicamente se puede crear, mira a tu alrededor, fijate que no hay paleta más impresionante que las mismas emosiones humanas, que no hay pinceles más manejables que la gente que te rodea, Billie Joe Armstrong alguna vez dijo:

"Do you ever want to lead a long trail of destruction
and mow down any BULLSHIT that comfronts you?
Do you ever build up all the small things in your head?
To make one problem that adds up to NOTHING"

Fuck yeah! Billie, en este momento quiero crear algo imperdonable, algo cahótico, algo inolvidable, con toda la energía que se pueda acumular en cada uno de mis músculos, quiero retratar el dolor, la agonía, la inequidad, la justicia, lo verdadero, lo falás, lo mortal y lo inocuo, todo en una sola imagen en un frame eterno, y porqué? porque en realiadad no tengo mucho más que hacer. Pero debo aceptar y ver la realidad, que tal vez de la manera en que están trazados los mapas de mi mente en este momento esa creación no pueda ser realidad, por eso, estoy dispuesto a herir y cicatrizar mi corazón de mil maneras distintas para poder abrir esos nuevos caminos que permitan a ese cahótico ser creador realizar su obra maestra, el problema es que eso es bastante trabajo, y cicatrizar lleva tiempo, tambien encontrar los movimientos que te hacen evitar el dolor, por eso tal vez sea mejor que me ponga manos a la obra.


Ricardo.


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