Wednesday, November 08, 2006

Virtualy impossible

Independencia, en el mismo lugar del Ecuador.
Noviembre 7, 2006.


Aun más veloz que la luz, un objeto superaría todas las barreras sin ni siquiera sentirlas si viajara a la velocidad del pensamiento, en un momento puedes cruzar fronteras, paralelos y meridianos, cierra los ojos, en un lugar ajeno donde el aire huele distinto, donde la gente habla distinto donde los ojos de la gente tienen un sombrío distinto, cierra los ojos para encerrarte en aquel espacio donde aun conservas la calma, busca el interruptor de luz, y siéntate a conversar con el recuerdo de mejores momentos, encuentra en la música el transporte necesario para atravesar la miseria, de lugares y personas, y encontrarte con la promesa que todo va a estar bien, mientras esperas la sincera confirmación en aquellos ojos en los que descubres luces nuevas cuando aun no las estás buscando, y todavía te intrigan cuando se nublan, aun me sorprende lo mucho que se ha transformado ese lugar, aquel refugio interior que antes se presentaba mucho más incierto que el mismo exterior; en este mismo lugar en una ocasión anterior me sorprendería prefiriendo la desidia de la realidad a lo claustrofóbico de aquel viaje interior, hoy creo que si no fuera por el hambre y algún tipo de animal que amenaza con transmitirme alguna enfermedad tropical, podría quedarme inmerso en este viaje a la velocidad del pensamiento, virtualmente imposible, pero ciertamente eficaz, porque puede que no haya inventado la teletransportación, pero fácilmente puedo abandonar este lugar que ya se está parando insistentemente sobre mis nervios, mis frágiles y reactivos nervios, abre los ojos, porque no creo que vaya a ganar el juego de serios con este bicho y estoy seguro que no sobreviviría lo que fuera a infectarme, asi que subo las ventanas, pongo el aire (muy a pesar de mi deteriorada salud respiratoria) y cierro de nuevo los ojos, porque esta vez si sé que hay un mejor lugar.


Ricardo.

Perpetual Movement

Independencia, algún lugar en el Ecuador.
Noviembre 7, 2006


Instigado por las propias circunstancias y sin mayor opinión al respecto, resulté de nuevo en un avión con rumbo a la mitad del mundo, que bien podría ser una metáfora precisa para la mediocridad, sin embargo tratando de dejar la mayoría de mis prejuicios en la sala de espera me embarqué con el ánimo de no ensombrecer la que ya sería de por si una vivencia algo complicada. Por primera vez viajaba totalmente solo, sin la supervisión de experiencias superiores, solo con mi propia experiencia, conseguida a las malas y contra todo pronóstico, y con mis propias opiniones, que no duermen ni se quedan enjauladas. Desde la mitad de algún trópico a apenas a 0.02° del ecuador escribo esto, con canto de pájaros de jungla y reggaeton (que dios guarde el alma de estas pobres personas o que el diablo las consuma eternamente), son las 11:10 AM y ya comenzó a salir el sol detrás de las que parecían ser nubes de lluvia, y con el sol se alborotan todas las plagas bíblicas que frecuentan este tipo de empalizadas, siempre he mantenido la compostura frente a la inminencia del fracaso y no en pocas ocasiones he logrado salir avante de peores situaciones, pero esta vez me resulta difícil mantener el profesionalismo a 28°C en un lugar desconocido y con un equipo de trabajo que no es el mio, por eso opto por la de las ratas y abandono el barco antes que se hunda por completo, con la única tarea de reportar los resultados a las altas jerarquías, por funestos que estos sean, menos mal no va a ser mi nombre después del ‘elaborado por:’ al pie de página del informe de tan infructífera empresa. Asi que mientras es la hora del almuerzo me las voy a dar de observador y hacerme el que trabajo en el portátil, por eso es que puedo escribir ahora, pero si alguien pregunta estoy preparando mi ‘reporte’.


Ricardo.

Ps: ...tal vez sean tres los que escriba desde el pasado, ya estoy de vuelta, gracias a quien se le deban dar gracias...

Ps2: al final terminé escribiendo yo la mitad del reporte oficial porque no puedo soportar la ineptitud... y pues no daría buenas noticias pero las dí con convicción.

Ps3:... y mañana más cuentachistes...